Esa es la conclusión a la que podemos llegar si leemos la contestación a la denuncia que efectuamos el pasado mes de febrero sobre la carencia o falta de funcionamiento de las rampas de acceso para personas con movilidad reducida de varios vehículos.
El Consorcio de Transporte de Madrid ha pedido información a la Empresa concesionaria y ésta ha emitido un informe en el que indica que "debido a la problemática existente con el viario por el que circulan los vehículos, en el que cada vez hay mayor cantidad de badenes que deterioran la mecánica de las rampas de acceso a personas de movilidad reducida instaladas en los vehículos, se ha procedido a actualizar el plan de mantenimiento de los mismos, incluyendo acciones específicas sobre las rampas con el objetivo de mejorar su funcionamiento".
Ya tenemos un motivo más por el que denunciar públicamente la vergonzosa situación de nuestro municipio en lo tocante a los badenes irregulares. No sólo suponen un peligro para las personas con movilidad reducida, al incumplir las normas sobre la continuidad de los recorridos peatonales, sino que además su excesiva altura deteriora los mecanismos que pueden permitirnos el acceso al transporte público.
Por eso nos sentimos indignados cuando escuchamos decir al Concejal de Seguridad D. Pedro José López Novillo en el pleno del Ayuntamiento del mes de diciembre de 2010, que no es prioritario para el equipo de gobierno el adecuar los badenes a la normativa vigente. En realidad no se trata de que sea más o menos prioritario, sino de que es legalmente obligatorio (más información).
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